El «préstamo de libros» es una actividad que busca fomentar el hábito de la lectura y el amor por los libros desde edades tempranas. En esta iniciativa, los niños de 2º ciclo cada viernes se llevan a casa un libro del colegio para leerlo junto con su familia, creando una experiencia compartida de aprendizaje y disfrute.
Cabe señalar, que hasta que se inicia esta actividad, o en niveles anteriores, la lectura de libros está presente y convive de forma permanente en el día a día en todas las aulas, ya sea en momentos de asamblea de forma autónoma, cuentacuentos de la mano de las profesoras o en el rincón de la biblioteca.
Dicho lo anterior, en esta entrada, exploraremos cómo funciona esta actividad, sus beneficios y algunas estrategias para potenciarla en el hogar.
¿Cómo funciona la actividad?
El funcionamiento del «préstamo de libros» es sencillo y efectivo. Cada viernes, los niños seleccionan un libro de la biblioteca de aula de forma autónoma, en base a sus gustos e intereses y lo registran en el panel con su nombre, siendo un panel distinto y más complejo a medida que los cursos van avanzando.
Una vez elegido el libro, los niños se lo llevan a casa con el fin de leerlo y disfrutarlo en familia durante el fin de semana, con ayuda de los padres, hermanos, abuelos…. Llegado el lunes, lo traen de vuelta a la biblioteca aula y junto con la profesora de castellano, en la asamblea, intercambian opinión acerca de los distintos y quitan sus nombres del panel para registrar que lo han entregado.
Beneficios de la actividad
El «préstamo de libros» ofrece múltiples beneficios tanto para los niños como para las familias, tales como:
– Fomento del hábito lector: Leer cada semana fortalece la rutina de la lectura y crea un vínculo positivo con los libros.
– Aumento del vocabulario y la comprensión: Leer en casa permite a los niños ampliar su lenguaje y desarrollar habilidades de comprensión lectora.
– Fortalecimiento de los lazos familiares: La lectura compartida se convierte en un momento de calidad que une a padres, madres, abuelos, … e hijos.
– Conexión entre la escuela y el hogar: La actividad involucra a las familias en el proceso educativo y promueve una comunicación entre ambos.
– Fomento de la autonomía: Elegir un libro y cuidarlo permite a los niños desarrollar habilidades de responsabilidad y organización.
Cómo potenciar la actividad desde casa
Para sacar un mayor rendimiento a esta actividad, detallaremos a continuación algunas estrategias que hacen de la lectura un momento especial y enriquecedor:
– Crear un ambiente adecuado: Buscar un momento y un espacio tranquilo y cómodo para leer juntos que evite las distracciones.
– Involucrarse activamente: La lectura en voz alta, hacer preguntas sobre el contenido o dramatizar las historias hace de este un momento más divertido y atractivo.
– Relacionar el libro con experiencias personales: Conectar la lectura con situaciones cotidianas o vivencias familiares ayuda a que los niños comprendan mejor el mensaje de los libros.
– Mostrar ejemplo: Cuando los niños ven a los adultos disfrutar de la lectura, es más probable que imiten ese comportamiento, por eso es importante crear momentos dedicados exclusivamente a la lectura.
– Feedback: Escribir palabras relacionadas con el cuento (personajes, lugares, elementos), hacer un dibujo de alguna de las partes favoritas, una manualidad, y compartirlas en clase en caso de que se quiera, hace de la lectura y la post-lectura un momento significativo para el niño.
En definitiva, el «préstamo de libros» es una actividad sencilla pero poderosa que promueve el aprendizaje, el desarrollo personal y la conexión entre escuela y hogar. Al implicar a las familias, se asegura que el amor por la lectura se convierta en un hábito duradero que acompañará a los niños a lo largo de su vida. ¡Aprovechemos esta oportunidad para crecer juntos a través de los libros!
Nos leemos.
