El momento de la comida está dotado de gran valor educativo.
Son momentos de calma y encuentro, en el que además de satisfacer una necesidad básica, aprenden a ser cada vez más autónomos.
Desarrollar los momentos de alimentación en su propia aula o espacio de referencia, en el que se ubican cada día, les permite sentirse seguros.
Durante el curso, hemos conseguido adquirir las distintas rutinas y disfrutar de cada uno de los momentos. Comemos solitos con los cubiertos, hay veces que es un poco difícil pero nuestras profes siempre están pendientes para ayudarnos. Algunos de nosotros tenemos alergia a algunos alimentos, por eso tenemos nuestros platos azules que nos permiten establecer una señal de alerta.
Tanto en la comida como en la merienda, estamos siempre sentados en las sillas esperando con paciencia a que nos pongan nuestra comida.
Nuestras cocineras, nos preparan la comida con mucho amor y cariño.
