Nadie duda de que el verano es una época de diversión, pero también de largos ratos en los que uno no sabe qué hacer, sobre todo en los viajes.
Para esos momentos, hemos preparado juguetes hechos en casa, creativos y fáciles de transportar, como lo son estas grandes ideas metidas en pequeñas cajas o latas. Son solo algunos ejemplos, existen muchos más como casas para muñecos, puzles, estuches de pinturas, clínicas para peluches… te invito a que busques tus juegos preferidos y te pongas ¡manos a la obra!
Garaje en una lata
Un diminuto coche de carreras ha encontrado su lugar en esta lata. Tiene carretera, rampa para entrar y salir de su garaje y, dentro de él, gasolinera, manguera de lavado y un extintor. Con todo eso está listo para acompañarte a cualquier viaje.
Juego de construcciones
Prepara una pequeña base de construcciones que puedes pegar en la tapa de tu lata con pegamento termofusible y guarda tus piezas preferidas para que vayan siempre contigo. Lo que antes eran ratos de aburrimiento se convertirán en creatividad.
Juego de pesca con imanes
Los más pequeños podrán disfrutar de la pesca con este juego de imanes. Puedes preparar tus peces con fieltro, papel, goma-eva o tu material preferido. Sólo tienes que meter en su interior una arandela o cualquier otro elemento de hierro, preparar tu caña con un imán y poner a prueba tus habilidades.
El juego puede ir un poco más allá y ayudarnos a practicar la clasificación por colores o los números.
Cocinar en cualquier lugar
Una caja de cartón de menos de 15 centímetros se ha transformado mediante cintas adhesivas de colores y un poco de fieltro, en una cocina portátil.
El menaje y la comida están hechos de pasta polimérica, aunque este es un ejercicio de creatividad, si no te atreves con la pasta, puedes utilizar otros materiales, incluso pegatinas.
